
Esta es una de esas cosas que no me explico. Se entiende que cuando MS-DOS se creó, nadie tenía idea del tipo de tecnología que con el tiempo se desarrollaría y la forma en que impactaría nuestras vidas. Pero de aquellas épocas para acá, ya han pasado, al menos en términos informáticos, eras tecnológicas completas como para que sigamos complicándonos la vida con prácticas tecnológicas obsoletas.
Una de estas prácticas o reminiscencia de eras informáticas prehistóricas es la dependencia de la notación de letras en el nombrado de unidades de disco del computador.

Hoy en día, está muy en boga el vender equipo con dos discos: uno de estado sólido SSD (de tamaño pequeño, pues no son baratos) y otro mecánico (de mucho mayor capacidad y con mejor relación costo-beneficio).
Obviamente el incluir el disco de estado sólido y designarlo como disco de arranque es plan con maña, pues hace que el computador se vea rápido pero (y sobre todo con el Windows), éste termina llenándose rápidamente. Los mensajes de «disco lleno» empiezan a salir, y muchos se quedan nomás mirando como el disco D: continua vacío. Momento en el que muchos recurren a mover sus archivos, lenta y manualmente, terminando con un equipo mal administrado y complicado.
Mientras que esto debería ya ser provisto por el sistema operativo de forma automática, lo cierto es que el Windows no lo hace. Sigue tomando el viejo esquema del disco C:. Cosa que se agrava con el hecho de que el sistema operativo en el universo «wintel» (y derivados) viene precargado y el usuario promedio, por lo menos, no puede hacer algo al respecto (me refiero a poder desde la instalación hacer una designación de disco del sistema y disco de usuarios o aplicaciones). Algunos dirán que eso queda para después, para cuando se creen las cuentas de usuario pero, al menos hasta donde yo he visto no hay tal posibilidad hasta el actual Windows 10.
La mejor solución a todo este embrollo es el mover los directorios (carpetas, como les gusta decir hoy en día) que se generan al momento de crear una cuenta (desde esa cuenta) al disco D:. Para ello se procede como se lista a continuación. No olvidar leer la clausula de responsabilidad de este sitio si se decide aplicar lo que aquí se describe.
a) Ya sea desde la barra lateral del Windows Explorer, donde se localizan los atajos para algunos directorios, o directamente navegando a C:\Usuarios
, entrar en el directorio raíz de la cuenta a mover, e ir dando click derecho sobre cada uno de los folders a relocalizar.
b) Al dar click derecho, seleccionar Properties en el menú contextual
c) Buscar la pestaña Location y ahí cambiar la letra del dispositivo de almacenamiento.
Es posible que se indique que en el destino la carpeta debe ser creada, permitirlo y que se mueva el contenido a ésta.
d) Para el caso de OneDrive lo mejor es, desde el momento de enlazar el equipo a la cuenta de OneDrive, el indicar la ruta al dispositivo de almacenamiento apropiado. Si esto ya fue hecho, basta desvincular y volver a vincular al equipo. Ya sea lanzando la aplicación o desde el ícono de la barra de tareas..
… hacer uso de las opciones de configuración …
… para que al momento de seleccionar la ubicación del contenedor sea sobre la unidad D:. Aquí como se ilustra, en un equipo ya vinculado, aparece la opción de cambio de ubicación, que al final permite que la carpeta del contendor se ubique en el dispositivo que uno elija.
Referencias
- Avram Piltch, «How to Move Your OneDrive Folder«, Laptop Mag, web. Published: 2016.08.17; visited: 2021.07.21. URL: https://www.laptopmag.com/articles/move-onedrive-folder.