Aunque me lo diga un etólogo, no le creería. He vivido casi toda mi vida (quitando pocos periodos sin mascotas o teniendo otras) rodeado de gatos. Sé como tratarlos (hasta un punto razonable, pues no dejan de ser animales y no tenemos un lenguaje para poder intercambiar impresiones de un nivel más alto) de forma que puedo educarlos para que no exhiban un cierto comportamiento, claro, hasta donde el gato quiere y entiende (y no, con este último término no estoy contradiciéndome). Así como entablar una relación que va mucho más allá de lo que muchos dueños de gatos sólo la tienen de ornato.
Tener un gato de mascota no es para cualquiera. Pueden ser muy peligrosos si se les molesta y hay de razas a razas; algunas más pacientes, otras aun muy cercanas a lo que es un gato salvaje. Hasta cierto punto lo que podemos encontrar con un perro pero lo menciono porque muchos los subestiman por su tamaño y ni creen que puedan ser «de compañía» ni tener actividad juguetona como con perro.
Escribo lo anterior porque hace tiempo leía una pregunta en Quora (de la cual ya he perdido la liga, sorry) sobre si los gatos y perros entienden el castigo, y que derivó en muchas respuestas en las que daban una comparación positiva para los perros y negativas para los gatos pero, es por mi experiencia con estos animales, que creo que éstas últimas han sido formuladas desde un punto de vista humano y considerando la educación canina. Creo que quienes las respondieron no tienen realmente idea de lo que es la convivencia con un gato.
Así es que, precisamente por lo que escribo en los dos primeros párrafos, por lo que lo menciono, porque como cualquier otro animal no racional (a nivel humano) se les puede educar y condicionar por recompensas y castigos. Yo lo he hecho, y sé que así es.
Así como sé que los gatos de la foto están juguetones, por su mirada y pupilas dilatadas, conozco los movimientos corporales cuando están enojados, sienten curiosidad o se preparan a defenderse. Igual, cuando por sus maullidos buscan compañía para jugar, tienen hambre, están enfermos o se defienden. Si se mantiene y realmente se busca tener una comunicación (bajándose a su nivel) con un gato, es posible poder apreciar lo que ellos entenderán como un castigo o retroalimentación negativa a fin de poder modificar su conducta.
Siguente