«La maldición de todo creador es terminar lo que inicia», o algo así fue lo que alguna vez escuche o leí. Estaba en la maestría y lidiaba con dos cosas: un empleo en el que no veía mucho futuro salvo estar a las expensas de los capricho de los jefes y mi tesis de maestría. En aquella ocasión decidí que lo más importante era lo segundo y me deshice de lo primero. Y, según yo, fue ese el momento en el que me di cuenta de que pese a mi desbordado entusiasmo por iniciar las cosas, me costaba concretarlas.
No soy el único, lo veo muy seguido, y como he mencionado yo mismo lo experimento seguido. Todos somos creadores, de una u otra forma, y todos podemos experimentar esa renuencia a terminar algo que iniciamos.
¿Por qué pasa esto? No lo sé. ¿Será que disfrutamos tanto hacer algo que no queremos que termine? Quizás. ¿Será que nos preguntamos qué haremos al terminar lo que iniciamos? Puede ser. ¿Será que nos aterra ya no encontrar algo más después? Quien sabe… ¿será que en realidad no sabemos como terminar aquello en lo que nos embarcamos? Sí, hay ago de ello. Y, si a lo anterior agregamos un espíritu perfeccionista, estamos condenados. Mi directora de la tesis de maestría me recordaba muy seguido: «un perfeccionista nunca termina lo que inicia.» ¿Sería que ella veía en mi signos de estos problemas? Seguramente.
Me viene a la mente una frase que recuerdo supe de ella cuando tenía entre 3 y 5 años. Veía en unas tarjetas incluidas en un juego de tanagramas de madera tallada que mi mamá compró a un vendedor de «puerta en puerta». Un proverbio chino, según recuerdo, que dice «un viaje de mil millas inicia con un paso.» Un proverbio como muchos otros similares que nos invitar a iniciar la aventura. Pero, no recuerdo de ninguno que nos hable de como concluirla.
Como sea estos demonios internos crecen, mutan, se adaptan. Aún me cuesta terminar lo que inicio, es un vicio. Y aunque no identifico algo en concreto para solucionarlo, creo que el identificarlo es el primer paso. El resto es disciplina, como el terminar este post el mismo día que lo inicio.