
Un día antes del sismo del 16 de febrero pasado escribí el primer post de esta serie. En él mencionaba como mucha gente ya continuaba con su vida y olvidaba mucho de lo que ocurrió cinco meses atrás, como si lo ocurrido fue sólo un evento que no volvería a pasar en años1. Hace dos días la naturaleza nos recordó lo contrario y creo sirvió para que muchos no olviden lo frágiles que somos.
El pasado sismo me sorprendió en la UPIICSA en una reunión de trabajo con una de mis tesistas. Las alertas sísmicas nos avisaron con la suficiente antelación para salir del edificio de posgrado que incluso pensamos podría ser una falsa alarma. En la zona donde nos encontrábamos el sismo no se sintió muy fuerte, si lo suficiente como para saber que era de considerable magnitud, pero personalmente lo consideré de M6.5. Comentábamos que casualmente ambos habíamos pensado recientemente que «ya tenía tiempo de no temblar».
Creo que ya estaba acostumbrado a cómo se sienten los temblores en la col. Roma, ya que no creí que fuera de M7.2 como finalmente fue medido. Definitivamente en la Roma se sienten más duros. Precisamente es esta percepción el motivo de esta entrada.
El del 7 de septiembre, que fue de M8.2, el más fuerte registrado a la fecha en nuestro país, no lo sentimos tan duro (sí, claro, la distancia). Yo recuerdo que en esa ocasión pensé que, si eso había sido uno de M8.2, la CDMX resistiría lo que fuera. El del 19 de septiembre me mostró cuán equivocado estaba. Un sismo de M7.1 a 120 km causó más daños que el de M8.2 y ha sido el más fuerte que he sentido en mi vida. El de ayer fue de M7.2 y no pasó del susto. Esto a veces puede resultar muy confuso. Sí, lo sé (y me adelanto porque cada que pasa esto, toooddddoooossss nos volvemos sismólogos y DRO expertos), la distancia es aquí lo importante y, a lo que quiero llegar con este post, es la información que recibimos con la determinación de la magnitud.
Cuando supimos de las estimaciones iniciales del sismo del viernes, que se anunciaba de M7.0, muchos nos extrañamos, pues teníamos fresco el recuerdo del pasado sismo del 19s-17. Es aquí donde surge el cuestionamiento, ¿esta información nos lleva o nos ha llevado a tomar o no tomar las adecuadas medidas de seguridad? Yo creo que no, al menos creo que la gran mayoría concordará conmigo en que desde el 19s-85 ya nos habíamos relajado un poco, pues pensábamos que las normas de construcción post 19s-85 más la relativa falta de daños por sismos desde entonces nos aseguraba poder soportar uno de M8 sin problemas.
Si bien las escalas de medida actualmente empleadas dan una idea de la fuerza o energía que un sismo manifestó (que supongo pueden asociarse más al centro del evento o a la amplitud de éste), lo cierto es que resultaría más útil una escala que nos dijera cuál es la fuerza del suceso en su punto de origen y cuál debió ser su percepción en ciertas zonas. Si esto pudiera incluso poder ser informado con anticipación, mucho mejor.
Aunque uno pensaría que esto de la medición de la magnitud de un sismo es ya un asunto resuelto en sismología, al menos para determinar la fuerza del evento, lo cierto es que aún no lo es2. Más importante es que aún nos falta información para prepararnos adecuadamente. Sí, quizás no podamos hacer mucho cuando el epicentro se sitúa tan cerca de la CDMX pero las tradicionales zonas sísmica están lo suficientemente alejadas para pensar en algunas mejoras.
Adicionalmente, no dudo que desde hace tiempo se sabe perfectamente el tipo de subsuelo en las diferentes zonas de la CDMX, por lo que es perfectamente posible saber donde se sentirá con una mayor fuerza. Contamos ya con aplicaciones y servicios de alerta que nos permiten enterarnos del suceso con antelación suficiente para evacuar. Algunos tal vez lo consideren innecesario, pero sería muy útil el que estas aplicaciones (si es posible) contaran con una tabla de percepciones por dichas zonas. El saber que se aproxima sólo un sismo «violento» o «severo» asusta más que cualquier otra cosa.
Referencias
- «Podría existir relación de sismo con terremoto del 7S: Sismológico Nacional«, Excelsior, web. Publicado: 2018.02.17. URL: http://www.excelsior.com.mx/nacional/2018/02/17/1220996
- «Magnitud de un sismo«, Servicio Sismológico Nacional, UNAM, web. Revisado: 2018.02.17. URL: http://www.ssn.unam.mx/jsp/reportesEspeciales/Magnitud-de-un-sismo.pdf