El pasado fin de semana decidí dar rienda suelta a mi irresponsabilidad y procedí a instalar macOS 26 «Tahoe«. Escribo «irresponsabilidad» porque lo más sensato era esperar al menos una actualización de mantenimiento para hacerlo, esperando que para entonces todos esos bugs y problemas propios y esperados de toda actualización mayor hubieran sido mitigados o erradicados. Pero no, me ganó la impaciencia y procedí con el upgrade.
Varias entradas sobre «Sequoia» se «quedan en el tintero» y deberé darles salida a través de «Tahoe» si es que aplica el problema (o «aventura») aún.
Su descarga:


y la primer actividad post instalation:



