Desde hace mucho que uso a Google, no sólo para localizar cuanto documento o material necesito sino para resolver cualquier duda que pueda tener. Usualmente, 10 o 15 minutos de consulta bastan para encontrar lo que necesito (y más). Solamente cuando los resultados no me dan lo que busco usando lo que disparó la consulta (una palabra, un mensaje de error, alguna acción para lograr algo o conocimiento específico) debo dedicar un tiempo buscando pistas en los primeros resultados que me ayuden a reformular una segunda, tercera, cuarta o las consultas que sean necesarias para determinar qué debo buscar o cómo buscarlo.
A partir de finales del pasado año, la liberación de la cuarta versión del chatbot de OpenAI, chatGPT, generó muchas conversaciones y muchos modelos similares empezaron a aparecer. Aunque quizás lo correcto sea decir que todas estas herramientas empezaron a llamar la atención o ganar más popularidad, pues muchas de ellas ya estaban en el mercado desde hace tiempo.
No hace mucho, Elon Musk informó de un «toque de queda» en Twitter por lo que él llama un «nivel extremo de extracción de datos y manipulación del sistema». Lo más seguro es que cayera en cuenta que muchos de estos servicios o productos de inteligencia artificial estuvieran sacando provecho de Twitter en forma gratuita porque «la manipulación del sistema» (si es que se refiere a el «astroturfing» y cosas semejantes, es algo que ya se conoce desde hace tiempo; de hecho fue un punto en mi trabajo doctoral).
En Twitter pululan los tweets hablando del correcto uso de chatGPT para sacar la chamba, hacerse rico o aprender lo que sea. En un inicio parecían útiles pero empiezan a rayar en el hartazgo. Yo ya había abierto cuenta en OpenAI desde hace tiempo pero realmente no me había interesado en esto hasta hace poco. No sólo por la cantidad de mensajes al respecto sino porque en las ofertas de trabajo ya empieza a mencionarse cosas como ‘prompting engineering’ o «prompt engineer«, por lo que consideré que era hora de dejar a un lado prejuicios o preconcepciones y decidí ver realmente de lo que era capaz esta tecnología. Así que tras algunas pruebas hay mucho que comentar, pero lo más adecuado es irlo haciendo en entradas individuales.
Dr. Edu 