
Título: «Derecho Informático»
Autor: Antonio Hidalgo Ballina
Páginas: 428.
Edición: 1era.
Editorial: Flores Editor y Distribuidor
Género: Derecho.
Año: 2013
Lenguaje: Español.
Formato: Rústico.
ISBN: 978-6076100530.
Mi hija me compartió fotos de libros que sobre el tema del «derecho informático» encontró en una biblioteca de la UNAM. Le pedí sacar uno de ellos para verlo, y me trajo el que vio «más completo». Aunque este libro no lo leí como lo hago con la mayoría de los libros que registro en estas entradas en el blog, si traté de «hojearlo» a conciencia. Desafortunadamente, en las primeras páginas me encontré con cosas que no me gustaron y que me obligan a exponer aquí mis quejas:
- Para empezar el autor inicia con la definición de lo que es el Derecho, pero sólo se pasa hablando y contando de las definiciones dadas por otros y no aventura a dar una propia. Para un libro que uno estima será usado por estudiantes de derecho ya iniciados en los estudios jurídicos, el gastar hojas y hojas en la definición del derecho y sus ramificaciones me parece sólo relleno y hacerle perder el tiempo al lector.
- De las pp. 51 a 54 el autor define varias ramas del derecho en pequeños párrafos que no son más que largas oraciones. Considero que debió mejor hacer una lista de términos y definiciones. Esto constrasta muchos con las páginas 56 a 60, donde se lanza con peroratas en párrafos de página completa sobre lo sistemático o científico que debe ser el Derecho.
- Ahora, a manera de ejemplo, el apartado 1.6 titulado «Breve Historia del Derecho Mexicano», es breve ciertamente (pp. 60 a 62) pero no es sobre el «Derecho Mexicano» (si tal cosa puede existir, que yo considero debe referirse como «sistema jurídico» o «marco jurídico mexicano» pues el Derecho es la ciencia social que engloba todos los marco legales sin referencia por uno en específico) sino sobre el estudio del derecho a través del tiempo y la labor del historiador.
Así podría contiuar pero, al terminar esa primera unidad no consideré valiera la pena invertirle más al asunto por lo que trataré de ser más breve. La segunda unidad se dedica al «Derecho y la Informática» e inicia señalando dos líneas de investigación: el «Derecho de la Informática» (sic) y la «Informática Jurídica». La primera dedicada a los aspectos normativos de la informática y la segunda como «la aplicación de la informática en el tratamiento de la información jurídica» (sic). Para un informático, el resto de la unidad no es más que una recopilación de ideas apenas conexas y alguna que otra perorata sobre la necesidad de ponerse a legislar en el campo informático (y en donde se olvida al de la computación). El capítulo incluye referencias a varios sitios web pero la edad de la obra hace considerar que muchas de ellas ya no existan, estén vigentes o se mantenga el recurso que las hizo ser incluidas. Por lo que no consideré perder tiempo en ellas.
Más breve aún, las siguientes cinco unidades son dedicadas a tratar de explicar (dando las definiciones o percepciones de otros autores) sobre la apreciación jurídica (legislación y normatividad) relativa al usuario, «relativa a la información» (aquí deberían ser primero los datos y luego sobre la información), luego sobre el software, acerca del hardware y al final sobre la función informática. Al ser un libro del 2013, para el 2025 se trata de una obra vieja (ya obsoleta en términos informáticos) pero incluso para su fecha de publicación en 2013 ya tenía un atraso de 10 años en el tema de software. Así que, para hoy no es más que una obra con dos décadas de obsolescencia.
Dos décadas es mucho tiempo. En el terreno informático es como hablar de otra «era geológica»… de mamuts y hombre en pieles cazándolos. Por lo que no es de extrañarse que la obra no considere el punto de vista de la seguridad informática, la informática forense (ya existentes entonces), y no inlcuya las implicaciones que la ciencia de datos, el aprendizaje automático, el cómputo de nube, el open source, la ingeniería de software colaborativa, aprendizaje profundo, la IA generativa, la robótica, el cómputo cuántico y muchas otras cosas más han traído a colación en los últimos 5 años.
Fue un libro (imagino) que esperaría un jurista leer para enterarse en el 2013 de aquello que debería considerar como «Derecho Informático» pero no es un libro sobre el que deba gastarse más tiempo (aunque… ¡todavía se vende en Amazon! 🫤). Quizás tuvo su momento pero ese «ya fue». Por supuesto no es un libro que un informatico debe leer para iniciarse en el tema.
