
Título: «ACT Terapia de Aceptación y Compromiso con Adolescentes «
Autor: Javier Mandil, Paula José Quintero y Fabián Maero
Páginas: 127
Edición: 1era
Editorial: Akadia
Género: Psicología
Año: 2017
Lenguaje: Español
Formato: Rústico
ISBN: 978-987-570-317-9
Este libro me lo prestó una terapeuta con la que estoy trabajando para limar algunas asperezas en mi rol como padre. Describe los elementos de lo que en el campo de la psicología llaman y definen como «una terapia». El nombre de ésta, las siglas ACT son del inglés Acceptance and Commitment Therapy.
Mientras redactaba este resumen, buscando una liga que pudiera colocar sobre el significado de ACT me topé con la que he usado cuyo primer párrafo me ha parecido muy claro en cuanto el significado del término, cosa que el libro no consiguió. Aunque muchos quizás digan que esto es un punto importante, yo le concedo el beneficio de la duda a la obra pues ésta es para el iniciado, el psicólogo, y ello puede ya ser obvio.
Uno pensaría que los psicólogos serían un grupo con un manejo del lenguaje más apegado a sus definiciones estándar pero el uso de palabras como “fusión” o “contingencia” me parece extraño y no logro hacer ese contacto con la concepción que tengo ya de esos términos. Es algo raro.
Hace años, mucho años, tomé un curso de neurolinguística que me decepcionó mucho pues todos los nombres de los ejercicios, a mi parecer, tenían nombre ridículos (que «el Peter Pan», «el Pinocho«, «el espantado», «el perrito», etc.), supongo que para hacerlos más atractivos y facilitar su aprendizaje, pero no dejan de parecerme ridículos y el asunto «no pegó conmigo». Algo así encontré con los nombres de los ejercicios que se sugieren para desarrollar las acciones que conforman las distintas fases de la terapia. No se qué se se traen los psicólogos con los nombres. Por ejemplo, si lo que uno busca es de alguna forma enfrentar pensamientos negativos recurrentes que a uno le atormentan antes de iniciar una actividad o durante su realización, ¿por qué no nombrarla «enfrentar la ansiedad» en lugar de, por ejemplo, llamarlo «monstruos en la mochila»? «Monstruos en la mochila» es el nombre de un ejercicio de visualización de todo ese bagaje de preocupaciones que llevamos a cuestas y que siempre nos hacen dudas de nuestras acciones o capacidades. En ese sentido (hoy que está de moda «Dune«) puedo decir que le doy más credibilidad a la «Letanía Bene Gesserit» contra el miedo (por el nombre) que a estos ejercicios (sin demeritar con ello lo que la terapía busca y la justificación de ello).
«I must not fear.
— Frank Herbert, «Dune».
Fear is the mind-killer.
Fear is the little-death that brings total obliteration.
I will face my fear.
I will permit it to pass over me and through me.
And when it has gone past, I will turn the inner eye to see its path.
Where the fear has gone there will be nothing.
Only I will remain.»
Bien, con respecto al libro, es una obra sencilla. Creo que lo que más busca es ser un prontuario de la aplicación terapéutica de ACT que un libro de referencia psicológica. Mi opinión es que el conjunto de conocimientos detrás de ACT simplemente son organizados en forma de un marco de referencia que busca dar coherencia la interpretación de una problemática y su posible atención psicológica (terapia). Un conjunto de conocimientos donde se busca dar un sustento, una interpretación y un anclaje.
El inicio de la obra me pareció interesante pues toca algunos puntos relacionados con el lenguaje. Copio aquí algunos pasajes:
En relación con la capacidad única como especie que tenemos en el desarrollo de un lenguaje:
…sostiene que en el corazón de todos los fenómenos vinculados al lenguaje y cognición (lo que se denomina conducta verbal en el análisis de la conducta), se encuentra una conducta operante engañosamente simple: relacionar. La definimos como una conducta operante porque se trata de una conducta aprendida, que puede ser emitida frente a ciertos estímulos discriminativos y reforzada.
Consideremos uno de los fenómenos más primarios del lenguaje, el aprender el nombre de algo. Nombrar consiste en establecer y responder a una relación entre dos estímulos; es decir por instrucción directa o indirecta aprendemos a relacionar.
p. 8
Sobre la capacidad asociativa de nuestra mente:
Las respuestas relacionales que tienen las propiedades descritas de reversibilidad, que son combinables entre sí y que llevan a una transformación de la función de los estímulos son denominadas «marcos relacionales», y RFT sostiene que son la base de nuestras habilidades simbólicas.
Estas redes relacionales pueden transformar la función psicológica que un estímulo posee para una persona. Por decirlo de alguna manera, todo estímulo que entre en una red de respuestas relacionales como la que hemos descrito tendrá piedades psicológicas directas, aquellas intrínsecas al estímulo en sí (si se trata de un objeto, por ejemplo, el peso, tamaño, forma, textura, etc.), y además propiedades psicológicas que podríamos llamar simbólicas, que son resultado de sus relaciones con otros estímulos.
p. 10
Sobre las consecuencias enfermizas de esa capacidad asociativa:
Este es el proceso que en ACT se denomina fusión, es decir la predominancia de las funciones simbólicas por sobre las funciones directas de un estímulo. Gracias a la bidireccionalidad del lenguaje, las propiedades verbales funcionan como otras propiedades de los estímulos. «Esta bicicleta es roja, pesa 30 kilos, y es fea», decimos, y actuamos como si olvidásemos que, a diferencia del color y el peso, «fea» no es una propiedad intrínseca de la bicicleta sino un juicio, una operación verbal realizada sobre ella.
p. 11
La retroalimentación negativa continua de ese proceso de fusión:
…intentos frenéticos de resolución verbal de los problemas -lo que llamamos rumiación o preocupación- pero no son procesos patológicos per se, sino que pueden convertirse en patológicos si dominan rígidamente la acción.
p. 12
Y sobre el efecto en la conducta
Cuando la conducta está controlada por los estímulos del ambiente se la denomina conducta basada en las contingencias, y consiste en la interacción con las propiedades directas de los estímulos ambientales. La conducta en este caso está íntimamente ligada al contexto y cuando éste cambia, la conducta se modifica con él. … El control o influencia del ambiente sobre la conducta es algo que se sustenta desde hace más de medio siglo en la literatura referente al análisis conductual.
Ahora bien, por los procesos descriptos hasta aquí, sabemos que la conducta de los seres humanos no sólo está controlada por el ambiente físico sino que también puede ser controlada por el lenguaje, es decir, la conducta puede regularse verbalmente.
Bajo ciertas condiciones los productos verbales se vuelven parte el contexto de otras conductas, y esto transforma radicalmente is relaciones entre el ambiente…
p. 14
Después de ese inicio, la obra da lugar a la definición de los conceptos (el establecimiento de un lenguaje común… con el lector) de lo que sustenta el marco de referencia y pasa a la definición de esos ejercicio o estrategias. Ahora, haste ese punto (que nos lleva al final del libro) todo bien pero para quien no tiene práctica en el asunto la pregunta es ¿cómo lo aplico? Sobre todo desde el punto de vista como padre donde se presentan algunas consideraciones adicionales. ¿Puede ser uno padre y terapeuta a la vez?
