El año pasado estuve viendo algunas series viejas por YouTube mientras hacía alguna labor doméstica. Ya me «aventé» UFO y Space: 1999. Actualmente estoy con The Invaders.

A pesar de ser viejas y resultar muy inverosímiles para los estándares actuales, no dejan de ser entretenidas y apreciar ciertas cosas o valores ahora ya perdidos. A los niños no deja de causarles curiosidad las historias… bueno, algunas porque para ellos, por ejemplo, The Invaders resulta muy aburrida.

En comparación con los recursos actuales, las series de los 60 tenían efectos visuales que ahora vemos muy burdos, sobre todo las americanas, las viejas series inglesas creo que se defienden bien. Sin embargo se recurría al suspenso, la trama, la música y al psique del televidente para llenar los huecos que quedaran.

Hoy en día se recurre más a los efectos visuales, efectos por computadora, violencia, temas sexuales y descripciones gráficas hiperrealistas para mantener el interés del televidente. La trama en sí, las actuaciones y adornos (música, ambientación es algo secundario, con sus honrosas excepciones).

Siempre me he preguntado, ¿cuántas series de TV se habrán hecho a la fecha? ¿Cuántas valdrían la pena verlas? ¿De qué me he perdido? Mucho de mi mundo del entretenimiento giraba entorno a la TV, hoy ya no. Como señala el artículo al que lleva la liga en el tweet abajo citado, el negocio del televisión ha cambiado.

Siguiente entrada