En la pasada entrega de esta serie de posts no quise exponer las razones por las que en este momento la promoción del uso de la bicicleta en la Ciudad de México (que igual puede aplicar en cualquier otra concentración urbana) debería ser considerado un problema (tomando en consideración las condiciones en las que se hace y que, considero, las referencias a las que cito en dicho post deben evidenciar). He recibido algunos comentarios sobre el tema y esperaba que la gente interesada revisara las referencias que menciono a fin de que llegara a las mismas conclusiones, sin influencia de mi parte. Parece haber funcionado y espero mis lectores vean como coincidimos.
Sí, la promoción del uso de la bicicleta es definitivamente un asunto ecológico. Sí, es una solución al problema de transporte urbano, beneficia la salud y la economía de quién la usa. Creo que nadie estará en desacuerdo. Yo estoy de acuerdo con lo anterior. ¿Entonces? Lo que critico y expongo es la equivocada forma en la que se hace, que es un asunto político y de urbanidad. Desafortunadamente, los políticos hacen uso de cualquier pretexto a fin de sacar provecho sin pensar en lo que realmente se busca y echan mano de lo que encuentran sin medir las consecuencias ni considerar la adecuada adopción de sus propuestas.
Actualmente existe una consigna política por fomentar todo aquello que sea ecológico. No importa si es una consigna de partido o individual. Los políticos y autoridades dan preferencia a lo ecológico y aquello que no involucre a un vehículo automotor porque es lo que mucha gente espera que eso hagan. Es lo que «políticamente correcto». Por una parte, la demagogia para aparentar la empatía por las clases menos privilegiadas. Por otra parte la búsqueda de las preferencias electorales y partidistas por ser visto como social o ecológicamente responsable. Si estas facetas no son percibidas por la población, se presume que las encuestas darán cuenta de ello para al final la aprobación de la gestión o la posibilidad de elección ser lo que cuente en la carrera política, no el sí el bien logrado o por lograr.
La extensión del post está creciendo y me veo obligado de alargar un poco más la serie dejando temas de éste para posteriores entradas. Sin embargo, sobre este tema quiero incluir un par de tweets recientes que se dieron en la semana pasada con motivo de tweets del delegado de la Cuauhtémoc que hizo sobre los cambios del nuevo Reglamento de Tránsito.
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Y otros tres tweets relevantes sobre el tema:

