Uno de mis frecuentes debates con Miriam es si es más importante las actuaciones o la trama de una película o programa de TV. Sí, ya se que no faltará algún lector de este post que comience a pensar que se trata de ambas cosas y se sienta tentado a iniciar un comentario al respecto pero, antes de que eso ocurra debo aclarar que entiendo y estoy convencido que una buena obra siempre será igual a la suma de sus partes, lo que aquí expongo es sobre la importancia que dos personas dan a dos aspectos de una obra.

Miriam, por su parte (creo) parece considerar que son las actuaciones lo más importante sin importarle mucho la trama. Dice ella que debe ser convencida de lo que transmite el personaje para «que se lo crea» (sic). Yo digo que esto es una apreciación incorrecta, ya que «si se lo cree» es por la coherencia de la obra, no de cómo se transmite. Por mi parte,  de escoger entre actuaciones y trama prefiero una buena trama sin importar quién y como actúe. Para mi no es el reparto (como ocurre con Miriam) lo que me atrae de una película para verla, es lo que llego a percibir por su título  y la publicidad alrededor de la obra.