Necesito lana

Melate es un juego de azar, un sorteo organizado por Pronósticos Deportivos dentro de los productos de las loterías estatales. Este sorteo siempre me ha atraído más que la tradicional Lotería Nacional (en la que hay que repartir el premio entre 20 boletos que integran toda la serie), las quinielas sobre futbol americano, beisbol o futbol soccer (no soy seguidor de un equipo y uno depende del desempeño de terceros), u otros juegos de azar. Aunque las posibilidades de ganar (inició con 40 números, ahora hay que escoger entre 56) son menores quizás a los otros, el premio puede ser para uno solo y los montos son siempre muy atractivos. Siempre he deseado e imaginado poder ganarme uno de los principales premios (seguramente al igual que mucha otra gente más, aunque curiosamente he conocido gente que dice que no le entra a estas cosas por miedo a ganar y luego no saber que hacer con el premio y ser objeto de envidias; hay de todo en esta vida).

Cuando estaba en la licenciatura, en alguno de los cursos de probabilidad y estadística, recuerdo que viendo el tema de cálculo combinatorial salió este sorteo a colación (supongo que en muchas escuelas y cursos, este es uno de los mejores ejemplos que toman los profesores para ilustrar como determinar las probabilidades de éxito con base en el total de combinaciones posibles). En esa época llegué a considerar poder hacer un aálisis estadístico de tendencia a fin de poder predecir cuál sería la siguiente combinación ganadora. Mis cálculos en áquel entonces me llevaron a la concusión de que cualquier combinación tenía siempre las mismas posibilidades de resultar ganadoras. Los resultados anteriores no importaban. No había una memoria de resultados que pudiera influir en futuros sorteos.

Tiempo después, cuando estuve trabajando en Sears, me encontré con un grupo de personas que usaba el mainframe de esta empresa para calcular combinaciones con base en un historial de frecuencia de aparición, un supuesto peso de la bolitas (la bolita con el número 1 no debería pesar lo mismo que las que tenían números de la decena 20 o de la decena 30, por aquello de la tinta) y algunas otras premisas algo raras. Alguno de ellos me contaba que tenía un amigo o familiar en Pronosticos Deportivos que le aseguró que había dos juegos de bolitas para evitar este tipo de predicciones. Esta información clasificada les daba a ellos cierta ventaja, decían. Eso sí, no consideraban que el juego de bolitas fuera seleccionado al azar también. Según me decían había ciertas reglas para esto, creo basadas en si había o no ganador del primer premio para alternar el juego de bolitas. Antes salían de una tómbola, hoy están en un contendor y son revueltas por aire. Hay toda una ciencia detrás de esto.

Ya en el posgrado, mientras trabajaba en mi tema de tesis y las redes neuronales eran el tema de moda, llegué a leer de un famoso usario (La_Morza) del BBS Spin– del que era usuario -que escribía también en algunas revistas sobre sus desvarios en tratar de hacer uso de un producto de software comercial que le permitía implementar diversos modelos de redes neuronales para tratar de analizar los resultados de Melate y sacar alguna combinación ganadora.

Yo hace mucho dejé de pensar en combinaciones ganadoras y dejé que fuera el propio azar quien determiné si gano algo o no. Todos los miércoles y viernes, religiosamente, hago mi apuesta de $60.00. No sé cuanto llevo jugando, ni cuanto he invertido. No quiero hacer cuentas, sería deprimente (en los cajones de mi escritoprio tengo todas la papeletas desde que inicié esta rutina) y lo tomo como una inversión riesgosa más en la que puede o no haber suerte. Por el momento mis ganancias se reducen a varios 7mos y 6tos lugares con los que apenas debo sumar unos $1000.00 pesos. Pero la esperanza perdura.

Recientemente comence a reconsiderar algo que ya había pensado en alguna ocasión, que si en lugar de seleccionar combinaciones azarosas en cada intento, tomaba una o dos fijas, que nunca hubieran salido antes y aferrarse a ellas hasta que le pegue a una. Obviamente para eso hay que buscar que combinación no ha salido aún. Echando manos a la obra y googleando un poco logré localizar un archivo de resultados históricos (precisamente en el sitio de Pronósticos, pero desde éste no lo encontraba). El archivo de resultados se remonta a 1984

Se trata de un archivo de texto, en ASCII, separado por comas, que puede ser visto en Excel. El lay out del archivo es:


Encabezado
Datos
.
.
.

los encabezados son

NPRODUCTO,CONCURSO,R1,R2,R3,R4,R5,R6,R7,BOLSA,FECHA

y como contenido del archivo me encontré con que NPRODUCTO es una constante de valor 40 que no cambia, CONCURSO es un consecutivo que va desde el 1 hasta el 2354 (último concurso registrado al momento de obtener el archivo), BOLSA es el monto de lo premios repartidos, FECHA indica la fecha del concurso y los resultados (números premiados) están en los campos «R«.

Bueno, hasta aquí este post, mientras pienso en el procesamiento.

2 comentarios en “Necesito lana

  1. Querido amigo René: Solo hay dos maneras de pegarle al gordo: 1° es de pura chirripada y la 2° es con ayuda divina. Como es eso de ayuda divina? Pués de que recibas los #s en un sueño o en la meditación. Para eso necesitas tener un proyecto espiritual, altruista o parecido. Bueno, primero hay que creer en algo mas grande que nuestra avaricia de dinero. Y te garantizo que el 99% de los grandes ganadores recibieron los #s de «arriba», no de su cerebro analítico. El factor «karma» tiene mucho que ver también, pero tu no crées en esas boberías, no? Hay quienes ven el futuro y no lo usan para sacarse el Melate. Qué tontos son, no? Nuestra vida está guíada por una fuerza Superior, y aquellos que ganaron esas bolsas chonchas – por alguna razon lo ganaron. Nosotros humanos no entendemos todo aunque pensamos que somos muy, pero muy inteligentes. Bueno, que Dios te bendiga, hermano!

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    1. Efectivamente no creo en intervenciones divinas o similares. Soy agnóstico, con más inclinaciones al ateísmo pero dado nuestro nivel de conocimiento concedo un cierto margen de duda razonable, por lo que me mantengo en el agnosticismo. Para mi, al final sólo son probabilidades y estadística. Sí creo que alguien pudiera llegar a «recibir» o «percibir» algo en un sueño o en un estado particular de consciencia pero lo explicaría como resultado del subconsciente, sin nada de magia, devoción o intento de algo bueno o filantrópico.

      Todos podemos ver o intuir algo, una parte, de lo que puede ocurrir en el futuro. Si tomas una piedra no necesitas lanzarla para saber que ocurrirá al llegar a una ventana, es sentido común. Puedes, esos sí, lanzarla con la mayor fuerza posible en un campo abierto si no sabes cuánto puedes alcanzar con la fuerza de tu brazo. Sin embargo, si conoces dicha fuerza puedes determinar a donde llegaría sin lanzarla con algo de física. Similarmente, hay cosas aun más complicadas que lanzar una piedra que pueden ser calculadas con mucha precisión y así hacer una predicción. «Predecir» no es algo que implique un don especial, una visión adelantada o el recibir un mensaje de una entidad divina. «Predecir» es hacer una suposición razonada. Ahora bien, en nuestro universo hay cosas aun demasiado complejas que no entendemos porque no exhiben un comportamiento regular o patrones de conducta que nos permita explicar (y por ende cuantificar a posteriori) su funcionamiento o porque aún no tenemos los instrumentos o conocimiento necesarios para poder comenzar a entender su naturaleza (sólo sabemos de sus efectos que bien pueden estar mezclados con muchos otros) y que tampoco por el momento podemos explicar su funcionamiento. Para estos casos, por el momento, sólo contamos con la probabilidad y estadística.

      Dice que hay gente que puede ver el futuro y que no lo usa para sacarse el Melate. Si yo tuviera ese don también, créeme que tampoco lo usaría para sacarme el Melate. Hay muchas otras cosas más redituables en que enfocarse que malgastar un don así en cacahuates.

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